Tener la casa propia es un sueño al que toda familia siempre aspira. Pero para llegar a concretar ese sueño es necesario mucho sudor, mucho esfuerzo. Y no solo eso, también es necesario que el constructor de la casa aplique las técnicas de construcción a la perfección y lograr una casa bien construida.
Las casas prefabricadas no son excepción a lo mencionado. Es necesario que la fábrica que construirá la casa prefabricada a ser instalada en el terreno sea un fábrica con un acabado conocimiento de la fabricación de las piezas a ser ensambladas, así como también el mismo conocimiento técnico para realizar el ensamblaje propiamente dicho en el terreno.
En ese sentido, existen ciertas características del trabajo de construcción de una casa prefabricada que se pueden mencionar para conocer mejor qué es lo que decimos con “una casa prefabricada bien construida”.
Casa aireada, ventilada e ilumnada
Habitar un hogar es diferente a planificarlo y los diseñadores y arquitectos lo saben muy bien. Por eso una de las claves a tener en cuenta es la ventilación de una casa. Es fundamental planificar la casa con ventilación cruzada.
Al planificar la casa de esta manera, se puede controlar mucho mejor la humedad y mantener secos los pisos, techos, paredes y muebles. Además la ventilación puede hacer más sencillo eliminar malos olores u otros agentes tóxicos de la casa.
Como si esto no fuera poco, y de la mano con la ventilación, el diseño arquitectónico siempre tiene que tener en cuenta la posibilidad de proveer abundante luz solar. Vivir en una casa prefabricada luminosa es sinónimo de vivir en una casa donde se puede saborear la felicidad.
Diseño de metros cuadrados interiores bien aprovechados.
Es sabido que los interiores son parte fundamental de una casa prefabricada. Tanto como el exterior, la fachada o el diseño general. Por eso, una casa prefabricada bien construida supone un diseño interior ergonómico, con los metros cuadrados con los que se cuenta bien aprovechados.
De esta manera, un diseño de espacios bien aprovechado puede hacer que cada habitación de la casa parezca más grande de lo que el conjunto en realidad es.
Materiales de construcción de buena calidad.
Algo que se cae de maduro es que una casa prefabricada bien construida debe estar construida con materiales de buena calidad. Esto hará que pueda durar más, ser más resistente al paso del tiempo y las inclemencias climáticas, pero, sobre todo, hará que sea más placentero habitarla.
Muchos de los fabricantes de casas prefabricadas utilizan materiales o aberturas (sobre todo) de mala calidad para abaratar costos. Es importante estar prevenidos y tener muy en cuenta los materiales con los que nos prometen que se constuirá la casa para así poder controlar estrictamente el nivel de calidad constructivo final a la hora de ser entregada la vivienda en cuestión.
El área de la cocina y de la sala de estar debe estar diseñada ergonómicamente
Tanto la sala de estar como la cocina son los principales ambientes de una casa. La mayor porción del tiempo que se destina a vivir en el interior de una casa se lo hace en la sala de estar y/o en la cocina.
Por eso, es importante que la sala de estar esté diseñada perfectamente y permita caber un sillón y una mesa de comedor con las respectivas sillas. Si el espacio de estar es más chico que esto, será difícil poder disfrutar del hogar.
Respecto a la cocina, la misma premisa aplica, con la diferencia de que los espacios deben permitir contener una mesada así como también las alacenas correspondientes a los útiles y conservas necesarias para la cocina. Un buen desarrollador sabe cómo diseñar el área de la cocina y cómo mantenerla optimizada.
Fundamentalmente son estos elementos, así como un exterior bien cuidado y espacioso, lo que hace a una casa prefabricada bien construida y capaz de ser disfrutable hasta el último rincón. Por lo tanto, es importante fijarse en detalle cada uno de estos puntos tanto a la hora de decidirse por un diseño y por una fábrica, como también a la hora de recibir la vivienda construída.